En estas dos últimas sesiones he cambiado la forma de trabajar con Andrés. Andrés viene con el dibujo, muy agil y eficaz, pero cuando llega a la pintura la resuelve con desgana y no aporta sino que estropea el dibujo. Hay algo en él, incluso en su postura que se queda fuera. Se coloca de cualquier modo, coge el pincel por el extremo, como si se le fuera a caer, aplica la pintura como sea, como si todo fuera un esfuerzo excesivo para él. Sin embargo cuando le pregunto que si le gusta pintar me dice que sí. De forma que he empezado por el principio, me propongo enseñarle lo mas básico. Ahora le corrijo todo, paso a paso. Como colocarse delante del cuadro o moverlo para entrar a pintar en una postura cómoda, como coger el pincel, elegir el área que va a pintar, buscar el color y hacer bien la mezcla, como pintar el área con una cantidad suficiente de pintura, acercarse a la línea sin dejar espacios en blanco.. , todo una y otra vez, en cada pincelada. El riesgo es que sufra demasiada presion y consiga aburrirlo pero de momento parece lo contrario. Ayer trabajó mucho mejor, se nota en el resultado y él lo percibe y le gusta, le salieron colores que le gustaban, y cuando lo poníamos vertical y nos alejábamos para mirarlo se reía encantado.
Cuando lo dio por terminado estuvimos viendo algunos cuadros de pintores famosos, le encantó Kandisky y viendo un cuadro de él que es solo mancha de color, sin dibujo previo se la propuse como idea y la agarró escribiendola despues en su cuaderno. Es la primera vez que veo que planifica en su cuaderno algo que va a hacer y que sea en pintura todavía me parece mas excepcional. Apunta bien, veremos..
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